El Seitán, la carne de Buda

Los primeros en elaborar Seitán fueron los monjes budistas de China
hace unos 500 años.


El seitán, también llamado Kofu, proviene del gluten, es decir, la proteína del trigo (localizado en el embrión, parte vital desde donde nacerá la vida). Tiene aspecto de bola pequeña, de color marrón. Su elaboración es mediante el amasado de harina y la formación de bollos de masa como las de la pizza o el pan. Luego se le aplica un proceso de lavado que elimina la harina y deja el gluten solamente. El siguiente paso es hervir con salsa de soja, Alga Kombu, jengibre y especias, para que tenga más minerales y vitaminas.



Beneficios y propiedades del seitán


Al comer seitán periódicamente, seas o no vegetariano, estarás incorporando a tu dieta muchos nutrientes saludables y a su vez variadas, con nuevas recetas y opciones. Es un alimento proteico con una digestión fácil, su sabor es muy suave y la mayoría de las personas lo toleran.

Es recomendado para los que padecen de anemia ferropénica, por tener mucho calcio y proteínas; además, para deportistas de alto rendimiento porque fortalece su musculatura; para aquellos que no comen carne, pudiendo combinarlo a la perfección con cereales para mayor aporte de proteína.

Por otra parte, los que tienen colesterol y elevados los triglicéridos y los que padecen de dislipemias, porque no aumenta los niveles en sangre. Finalmente, para los que tienen intolerancia a algunos alimentos tales como los lácteos o que encuentran dificultosa la digestión de la carne. Es muy liviano y no causa malestares o pesadez estomacal.

En cuánto a su sabor, es similar al de la carne, por lo que en algunas preparaciones casi ni se nota la diferencia. No se recomienda el uso de seitán en casos de hipertensión elevada moderadamente, en casos de intolerancia al gluten (celíacos) o de algunas alergias. Los bebés lo pueden consumir a partir de una edad, por lo que hay que preguntar al médico si lo acepta o no.


Información nutricional


  • Cuenta con un gran aporte de proteínas (el 24% de su peso)
  • Es bajo en calorías
  • No tiene colesterol
  • Con más calcio y minerales que la carne vacuna
  • Contiene lecitina en abundacia
  • No contiene grasas
  • Poco contenido de sodio
  • No tiene antibióticos ni hormonas